jueves, 31 de diciembre de 2015

Balance

Llega fin de año y generalmente nos da por hacer balance. Para quienes cumplimos años cercanos a la fecha, la casi necesidad es más imperiosa aún. Y viendo un año cargado de sinsabores, de desesperanza, de temor incluso por el futuro, paradójicamente, siento en lo personal un crecimiento gigantesco. Mis convicciones profundas muy poco tienen que ver con la política, es obvio que la política no le soluciona la vida a nadie (salvo a los que se aprovechan de ella) pero, valga nuevamente la paradoja, es gracias a la política que siento ese crecimiento personal. Porque es a través de la política y sus derivaciones en la vida diaria, y en la forma de actuar y de pensar, donde uno desnuda más abiertamente sus verdaderas convicciones personales. Más allá de frases rimbombantes o discursos elaborados, o incluso repeticiones ciegas de discursos adquiridos, el apoyar esto o aquello, el negar o desconocer algo, desnudan lo que verdaderamente piensa cada persona, lo que verdaderamente mueve sus actos, aunque ni siquiera sea capaz de verlo. Las contradicciones más flagrantes se ven con absoluta claridad en lo que cada uno sostiene políticamente, lo que uno verdaderamente es, más allá de lo que manifiesta. Y en algunos casos, es muy fácil advertir esto. Personalmente, me resulta casi natural. Y  un año tan convulso y tan difícil, me ha servido para poder ver detrás de las máscaras de muchos. Algunos, para borrarlos definitivamente, porque son nefastos y hasta a veces ni siquiera lo saben.  Otros, aunque buenas personas y con buenas intenciones, tienen en el fondo un resentimiento intrínseco, una ceguera pre juiciosa que los hace bastante inaceptables.  Y otros que, aún siendo coherentes y hasta mostrándose siempre solidarios y buenas personas, en el fondo, muy en el fondo, terminan razonando sólo de acuerdo a su conveniencia, por encima de la de los demás, o de lo general. Y es bueno conocer eso, aunque sigan siendo buenas personas.
Ya a principio de año vislumbre (como unos cuantos) cuál sería el final de lo que estábamos viviendo. Eso no me hace un “iluminado” (como se creía Steve Jobs, personaje al que tantos lloraron y veneran, cuando en verdad era un sinvergüenza), sino alguien que, fuera de circunstancias de momento y convicciones propias, es medianamente capaz de analizar la realidad más allá de sus deseos y convicciones. Y es que el despropósito que estábamos viviendo, la destrucción sistemática, solo tenía una salida, y no podía ser del mismo signo-partido (aunque los ladrones no tienen partido en verdad). Entonces, sólo había una alternativa posible, ya que las otras era sabido que nunca podrían llegar. Una alternativa sobre la cual yo mismo tenía algunas reservas, y ni siquiera voté. Pero puesto a analizar aún por encima de esas reservas, advertía caminos que incluso podrían llegar a observar hasta ciertos místicos o hablantes de la boca para afuera de caminos  superadores .  Y la primera diferencia que encontré entre mis reservas y las denostaciones de quienes demonizaban esa alternativa, fue aún más reveladora para mí : las reservas tenían que ver con lo económico. Y ciertamente que todos tenemos derecho a ganar mejores sueldos, a tener mejores cosas, etc.  Pero eso no es lo más importante. Cuando priorizas por sobre todo esa cuestión, tu escala de valores está ciertamente trastocada.  La mía no. Hay muchas cosas que están por encima de lo económico, y en este momento estaban en juego. Y en definitiva, con lo económico, hagan lo que hagan unos u otros, para nosotros, no demasiadas cosas van a cambiar. Tal vez sí, con el tiempo, con trabajo, pero hoy había otras cuestiones más esenciales para una vida mejor, más ordenada, más prolija, más respetuosa de las leyes.
Y así me encontré yo, anarquista desde que tengo uso de razón, pero no delirante, no viviendo en una nube de pedos, sino en la realidad, donde sé que el anarquismo es la última de las utopías, apoyando lo que en definitiva menos quisiera, pero más necesario es si ese mundo utópico al que aspiro no es posible: la ley, las instituciones, el respeto a los distintos poderes. Y riéndome y peleando contra aquellos que, sobre todo enceguecidos por su billetera, cuando no por ideas trasnochadas de supuestas “luchas” que sólo indican su odio, no sus convicciones, negaban y atacaban esa alternativa. Y cada ataque, cada comentario, cada análisis tendencioso que hacían estos, más y más desnudaban sus verdaderos principios, su verdadera falta de respeto a aquello que más necesitamos en estos momentos.  Y más y más reafirmaban mis creencias.
Esto está lejos de envanecerme con respecto a los demás, porque justamente si algo me han criticado siempre lo que me quieren bien, es que me doy poca importancia, que debería valorarme más y darme mayor importancia. Pero esta visión, es siempre “con respecto a los demás”, y para mí no es cierta., no sirve. La propia valoración debería ser siempre y exclusivamente con respecto a uno mismo, y en eso puedo estar tranquilo.
Con los años, uno va pensando y sintiendo la necesidad de saber qué es lo que deja para los demás, que ejemplo puede brindar. Y este crecimiento que siento hoy en día me llena de tranquilidad. Y me hacen sentir capaz de seguir molestando por mucho tiempo.
Ojala que tengamos un año más vivible, y que podamos desterrar al menos a los que lo hacen menos .



lunes, 23 de noviembre de 2015

Quién ganó? Quién perdió?

Puestos a pensar lo que sucedió ayer, no hay que dejarse llevar por primeras impresiones. Porque no todo es lo que parece.
En primer lugar, la gran ganadora casi en las sombras de ayer, es la Señora Elisa Carrio. Fue ella la que, en pleno acto público, le dio la espalda a un autoritario y retrógrado Pino Solanas y fue a buscar a Mauricio Macri. No me cabe ninguna duda que Lilita, en su fuero intimo, suponía llegar a una interna con Macri (y también con Sanz, que seguramente no tendría mucho peso)  ganarle esa interna a Macri y ser ella la candidata a presidente por Cambiemos. Desgraciadamente no fue así (creo que hoy estaríamos viviendo una historia diferente), pero ella tenía bien en claro los objetivos: En primer lugar, había que terminar con el autoritarismo, con la división, con la burla de todos los poderes y de todos los que no pensaran igual, con la corrupción. Cerró la boca entonces y se encolumno detrás de Mauricio Macri, porque era la única opción que hacia factible esto.
Y le salió bien. Ganó Macri nomás. Pero atención, que no todo lo que reluce es oro. Ganó Macri, si, pero si uno mira el mapa general, se ve que de las 24 provincias, en 15 ganó Scioli. Qué indica esto?
Muchos piensan que el kirchnerismo recibió el certificado de defunción ayer. Se equivocan. En realidad, el verdadero certificado lo recibió el 25 de octubre. El 25 de octubre, había demasiadas posibilidades de que Scioli llegara al tan ansiado 40% y ganara en primera vuelta. Y entonces sí, el que ganaba era el kirchnerismo, no Scioli. Pero el peronismo está harto de la señora, y se lo demostró en las urnas. No ganó Scioli. Tuvo que ir a un ballotage. Y aunque la señora no lo quería dejar despegarse, ya no era el candidato del kirchnerismo. La gente miraba las boletas y veía: Scioli (peronista) y Macri (derecha). Y en la mayor parte del país… ganó el peronismo, como casi siempre. Aunque no en la general, porque el grueso de la gente entendió que lo más importante, era la idea de Carrio, de rescatar las instituciones fundamentalmente. Algo que, con el peronismo… hummm….
Otro ganador entonces, desde atrás, es Sergio Massa. Muerto el kirchnerismo, Massa aparece como el peronista más fuerte. Si Macri no realiza una buena gestión, que le permita una reelección, entonces Sergio Massa, si mantiene una actitud coherente, tendrá grandes posibilidades de ser el próximo presidente en el 2019. Pero sería demasiado aventurado pensar hoy a tan largo plazo.
Lo más paradójico de esta elección es que si, el gran aporte para posibilitar el triunfo de Macri, vino de la provincia de Córdoba. Y en Córdoba si, la mayor parte de los votos fueron contra el kirchnerismo. Fue la provincia más castigada por este gobierno, la que más sufrió. Y se lo hizo pagar.
Qué queda a futuro? Para Cambiemos, pero sobre todo para Macri, una gestión que tendrá que caminar con pies de plomo, buscando acuerdos, gobernabilidad, y llegar a destino sin haberse echado en contra al pueblo. Por más que sus ideas sean demasiado poco agradables para el grueso de la gente, creo que tiene el pragmatismo suficiente como para poder lograrlo. Se verá.  Y para Cambiemos en general… aparecerá alguien, la misma Carrio, algún radical con posibilidades, que pueda enfrentar en unas PASO futuras a Macri para desbancarlo? Habrá que verlo también.
Para la gente en general, que se aprenda de una vez, que ya no es cuestión de izquierdas o derechas, que hoy hay que tener una visión más amplia, más democrática, el mundo NO ES MAS el de los 70! Y que ya es hora de que aprendamos que no se vota con el bolsillo, que eso es de una mezquindad asquerosa. Que si uno cree que con este o con el otro, a uno le va a ir mejor económicamente “en teoría”, aunque le vaya mucho peor a las instituciones, a la república en general, a la gobernabilidad, entonces… es mentira que les va a ir mejor!
Y para el peronismo, la posibilidad de que al fin, de una vez por todas, aprendan la lección: no se puede ir demasiado lejos con el personalismo, con el autoritarismo, con ese creerse los salvadores del mundo contra todos. Nunca aprendieron esa lección, y cuesta creer que lo hagan alguna vez. Pero… la esperanza es lo último que se pierde.

lunes, 26 de octubre de 2015

Izquierdismo básico

Viendo a la izquierda rasgarse las vestiduras por el inevitable advenimiento del “próximo Hitler”…primero… me causan gracia por el patético razonamiento fuera de la historia y de la realidad, y segundo, pienso: “qué raro, creo que no los vi despotricar con tanta saña y patriotismo contra todos los desastres que hizo y nos lega esta banda de delincuentes que ya se va”. Será porque muchas de las cosas que esta banda hizo, “supuestamente progresistas”, “supuestamente populistas”, son bien vistas por los miopes ojos de esta gente?  Entonces me acuerdo de los indios que les daban espejitos de colores para poder llevarse el oro. Lo que estos muchachos no entienden, y al parecer nunca entenderán, es que su Manual Básico de Izquierda está obsoleto, caducó, ya no existe, no se condice con la realidad. Lo que esta banda de delincuentes hizo, si es que en verdad algo de lo que hizo puede tildarse de “populista” fue siempre falso, fue siempre con la doble intensión de engañar a la gilada para mantenerla callada y tranquila, mientras ellos se dedicaban a enriquecerse asquerosa y usurariamente. Nunca, jamás, existió un “progresismo” más falso y malintencionado que este.
Es tristemente patético que ahora recurran a otro esquemita del Manual Básico de Izquierda para explicar la coyuntura actual: viene un gobierno popular- aumenta la clase media-la clase media empieza a creerse oligarquía y apoya a la derecha-la derecha destruye a la clase media-la clase media empobrecida vota un gobierno popular-...
Muchachos… esto no existe! Esto ya no se aplica, y menos a esta coyuntura! Ni se dan cuenta que prácticamente nada de esto se aplica a este gobierno: de popular no tuvo nada, más bien falsamente populista porque subsidiaba a los pobres para mantenerlos pobres y esclavos, y subsidiaba los servicios para que la clase media se bancara que subsidiara a los pobres; pero como lo único que les interesaba era enriquecerse ellos, y no tienen la menor capacidad ni interés en manejar la economía, con la inflación ingobernable... aumentaron la pobreza y disminuyeron la clase media; entonces... hasta el último eslabón de su círculo se les cayó: la clase media empobrecida... votó un gobierno de derecha para librarse de ellos!
Como están fuera de la realidad, y ahora sabemos lo que se va a venir, es muy fácil saber sobre qué van a despotricar en el futuro próximo. “Se los dijimos, estos eran fachos”.
Lo que no entienden estos buenos muchachos, es que el próximo gobierno (y ya ni importa de qué color sea) va a heredar un país prácticamente destruido, con una clase media destruida, con un aumento de la pobreza gigantesco, con las instituciones inexistentes, con la justicia sometida e impotente, con la industria muerta, con una deuda impagable, con el banco central prácticamente sin reservas… etc… etc… etc… Todo gracias a las “supuestas” medidas “populistas” que al parecer, a estos muchachos les parecieron bien.
Entonces… nos esperan años muy duros, muy difíciles. El próximo gobierno va a tener que hacer lo que pueda para intentar reconstruir un país que alguna vez fue prospero. Y va a tener que tomar medidas que seguramente nos afecten a todos. Entonces, van a saltar los esclarecidos izquierdistas con las consabidas admoniciones: “vieron, les advertimos que estos eran así, estos son lo peor de los fachos”.
Pero la realidad es muy otra. Porque, sean cuales sean las intensiones del próximo gobierno, nunca sabremos si lo que hagan será porque realmente es lo que está de acuerdo a sus pensamientos, o es lo que inevitablemente habrá que hacer para tratar de salvar algo de todo lo que este gobierno ha destruido. Y además, dentro de lo que hagan (o intenten hacer) estará lo que les dejen hacer, porque no olvidemos cual es la premisa básica de este peronismo que ahora quedará afuera del gobierno: o son gobierno, o no dejan gobernar. O ya no se acuerdan de Alfonsin? Cuánto de lo ocurrido durante su gobierno se puede achacar a su capacidad (o incapacidad) para gobernar, y cuánto de todo lo ocurrido fue producto de la guerra impiadosa a que fue sometido por este “supuesto” partido progresista y popular? Nunca sabremos si lo que Alfonsin podría haber hecho, aún con un ejército con cierto poder, aún con los poderes internacionales operando en contra, pero con real apoyo de los sectores populares, sin que le pusieran a cada paso palos en la rueda, nos podría haber legado un país muchísimo mejor que lo que hoy tenemos.
Como nunca sabremos si lo que haga, o lo dejen hacer al próximo gobierno, será algo bueno en definitiva para todos o no.
Lo que sí sabemos es que el Manual Básico de Izquierda, la falsa dicotomía Izquierda-derecha… ya es un versito del pasado, es una ensoñación de los vetustos años 70 que ya no existen.



lunes, 19 de octubre de 2015

EDUCACIÓN? CULTURA?

Desde hace cuatro años, las maestras del Jardín de Infantes  vienen a pedirme, para festejar el Día de la Familia, permiso para utilizar parte del balneario y poder enchufar los aparatos para pasar la música. Yo no tengo ningún problema, es un día distinto pero… siempre por alguna razón te terminan amargando. Claro que es un día para festejar, para divertirse, para hacer juegos pero… Y no les van a poner Bach, Beethoven. Por supuesto, tiene que ser música alegre, bailable. Y qué es lo que escuchan todos los días esos padres que vienen a acompañar a sus hijos? Qué es lo que escuchan esos chicos? Qué es lo que escuchan esas maestras?  BASURA, música villera de lo peor.
Y entonces me pongo a pensar en el compromiso del educador, y en como la gran mayoría ponen en evidencia que en realidad, están en eso porque… hay que trabajar de algo, hay que ganarse el mango. Y bueno, demasiado tienen que hacer para comprometerse un poco más. Entonces que hacen? Y, les ponen para alegrar la tarde, más de esa música de mierda!. No van a ir contra la corriente!. No se van a comprometer, por ejemplo, y ponerles para alegrar la tarde… zambas, chacareras… o al menos alguna música más “actual” pero que no sea basura y si sea bailable.
Y me vuelvo a preguntar… Qué es comprometerse? No es acaso ir contra la corriente? No es acaso en cada concepto, en cada elemento que le brindan al educando, la obligación de mostrarle lo mejor, lo más sano, lo más auténtico? Lo distinto, para que el educando sea capaz de discernir entonces, en algún momento, dónde está la verdad, o al menos lo que le gusta, lo que le parece mejor?
Parece que no son mayoría los maestros, profesores que se toman en serio su trabajo. Es demasiado complicado SER.
Y bueno, también lo veo en los contingentes de chicos que saben traer al hotel de enfrente. Generalmente, cuando es viernes, o sábado, a la noche les hacen baile en el hotel. Y qué les ponen? MARCHA, MARCHA, MARCHA estúpida marcha mecánica, estúpida y vacía, porque es lo que hoy se baila. Claro, en estos contingentes, puede haber algún maestro, algún profesor (en general son chicos de primaria o secundaria), pero mayormente quienes están a cargo de los mismos son… apenas empleados de turismo, una de las industrias más sucias y estúpidas que existen.  Y si no se le puede pedir compromiso a un maestro… qué se le puede pedir a esos pobres idiotas?


martes, 14 de julio de 2015

DEPORTE Y CULTURA

Uno es futbolero de alma, de nacimiento, fanático, y entiende perfectamente que el deporte es una parte muy importante de nuestra cultura. No es sólo una cuestión de esparcimiento, de distracción, de pertenencia. Y es muy difícil ser futbolero en un país donde… la mayoría de sus jugadores no lo respetan como deporte, donde la mayoría creen que sus rivales son enemigos, que van todos a cada pelota como si fuera la última, y si entre ellos y la pelota se interpone un rival… no importa, no existe, si se le pega, si se lo parte… son “gajes del oficio”, “lo importante es ganar… como sea” y “filosofías” por el estilo. Uno ama el futbol como deporte, y como deporte el rival, es un rival, no un enemigo, no alguien “a eliminar”. Uno ama el deporte y entiende que como tal, en el deporte hay reglas, hay jueces que aplican esas reglas, y hay que respetarlas para que el deporte pueda ser tal. Y tal parece que en el futbol, eso no es así, lamentablemente. Ni para los protagonistas, ni para los jueces, ni para los dirigentes, ni para el público mismo.
Y viendo los Juegos Panamericanos de Atletismo, uno no entiende: los futbolistas, son de otro planeta?  O de otra forma: los atletas, son de otro planeta? Porque los atletas también compiten, los atletas también tienen rivales, sin embargo, las cosas se viven totalmente de otra manera. O mejor dicho, tal como debería ser.
Veamos: en un juego final, en rugby- seven, Argentina- Canadá. El juez principal del partido… un argentino!  Esto sería impensable en el futbol. Ni siquiera las propias autoridades de la disciplina lo aprueban, el árbitro tiene que ser de un país neutral. Por qué? Acaso en el futbol un juez no puede ser capaz de aplicar las reglas, tal como son, no importa contra quien, no importa a quien “perjudiquen”?  En dicho partido, un jugador argentino comete una falta y el árbitro lo expulsa, como debe ser, y siendo un juego de 7 jugadores en una cancha para 15, esto es una ventaja enorme para el rival. Pero la falta existe, y punto. Argentina tuvo que jugar, durante el período de la expulsión, con un jugador menos, y así y todo, pudo mantener el marcador.
Uno se puede preguntar por qué existe esa filosofía tan distinta entre algunas disciplinas. Porque no es sólo en las disciplinas más individuales, sino también en las colectivas.
En las disciplinas  individuales, uno compite, uno quiere superar a sus rivales, quiere ganar también, y para eso compite. Pero más que los otros rivales, el primer rival es UNO MISMO. Uno puede no ganar, puede salir último incluso en la clasificación, pero haber superado aún así su mejor marca, por lo que también hay alegría. Esa es la primera esencia del deporte: superarse a sí mismo. Luego vendrán los rivales, pero primero… está uno mismo.
Esta filosofía, sin embargo, se encuentra de la misma manera en los deportes colectivos, tales como el rugby, el futbol mismo, los rivales son rivales, pero no enemigos. Existe algo que no existe en lo que es el futbol simplemente: el respeto por el rival. Y creo que sería una simplificación tonta decir que la diferencia, con el futbol profesional, es la plata.
Y aunque obviamente, la plata influye, y ensucia todo lo que toca, creo que el problema es mucho más profundo, es un problema que parte de la educación. Sin lugar a dudas, el atleta, el deportista que se dedica a estas disciplinas  (lo cual  se realiza desde edades muy tempranas en general) recibe desde entonces una educación especial, muy distinta, que implica un afán de superación, de esfuerzo, pero a la vez de respeto, de solidaridad.
Entonces, uno se pregunta: con tantos problemas que hay con la educación nacional, cada  vez más desvalorizada, cada vez más discutida, por qué no se implementa una verdadera educación física en los programas educativos?  Es más importante que un chico sepa sumar dos más dos, o que reciba todo el bagaje cultural que implican estas actividades?
Mi recuerdo de toda la etapa de primaria y secundaria, es apenas un día: en un ignoto pueblo de la provincia de Buenos aires, un profesor de educación física, UN DIA, por única vez, nos llevó a las instalaciones de un club. Allí (yo tendría 9 años), nos hizo practicar la mayor parte de las disciplinas: salto en alto, salto en largo, carreras de 100 metros llanos. Yo, flaco, patas largas, corriendo con los chicos de mi edad, no tenía competencia. Enojado, entonces, porque no tenía gracia, le pedí que me dejara correr con los más grandes. Y lo hizo, por supuesto, y es prácticamente el único recuerdo que guardo de todos esos años. Y eso que la actividad física nunca fue de mi interés posteriormente. Pero… y si lo hubiera sido? Tal vez ese día, gracias al ojo avizor de un profesor que sabe apreciar las posibilidades de cada uno, podría haber nacido una gloria del atletismo nacional. O no, pero si seguramente una mejor persona.
Es tan fácil, a esas edades, entusiasmar a un chico, incentivarlo para que, casi sin querer, desarrolle una actividad que, aunque tal vez no le reporte ganancias materiales, si seguramente hará que aprenda a ver la vida de otra manera, aprenda a relacionarse con sus semejantes de una mejor manera, a ser, en definitiva, mejor persona.

Cabría preguntarse, entonces, por qué a nadie se le ocurre.

sábado, 16 de mayo de 2015

Pais del odio

Cuando tenía 15 años vi llegar el lunes al colegio a un compañero con un ojo morado. Hincha fanático de River, se le ocurrió ir a ver el partido Estudiantes- River en La Plata. Grupitos de Estudiantes esperaban a los de River a la vuelta cerca de la estación, y los cagaban a palos. Esto no es de hoy. La mayoría de los hinchas argentinos viven del odio. Quien haya ido a una cancha sabe perfectamente que siempre hay gente buscando si hay algún "colado" del otro equipo en la tribuna para cagarlo a palos. Y esos tipos, llevan a sus hijos, y sus hijos aprenden eso como si fuera bueno. Y así. Y así pasa con otros “colectivos” en general. A nadie le preocupó jamás esto. La educación nunca hizo nada al respecto. Te hablan de San Martin, del Aconcagua, y de no se qué mierdas, pero de ética, moral, igualdad, respeto… nada. Obviamente, si lo que manda acá es el peronismo desde tiempos inmemoriales, y la premisa fundamental del peronismo es que si pensás distinto, sos enemigo.

La sociedad argentina convive con odio. Y a nadie le preocupa.

jueves, 19 de febrero de 2015

El mayor aporte del kirchnerismo

Sin quererlo, sin la menor intensión, el kirchnerismo fue haciendo el mayor aporte positivo al futuro de la historia argentina. Con su demagogia, con su inutilidad, con su soberbia ciega, con su persecución encarnizada a todos los que pensaran distinto, con su mesianismo enfermo, han logrado algo que hasta hoy parecía impensable. Como bien dicen los estudiosos y encuestadores, más del 50% de la población ni se interesa ni sabe nada de política, vive en su propio mundo. El caso Nisman ha hecho que muchos de ellos, de golpe, despertaran y se dijeran: “pero cuando mi país se convirtió en esto?”, y entonces, salieran a marchar, en silencio. Lograron despertar a los muertos con su destrucción de todas las instituciones del país!.
Otra cosa que lograron con absoluto éxito, es borrar toda posibilidad de oposición. Esto, que a priori podría ser mirado como trágico, como irremediable, puede llegar a ser todo lo contrario. Y creo que los mismos opositores lo están entendiendo, afortunadamente. Ayer, estuvieron en la marcha Macri, Carrio, Binner, Stolbizer, Sanz, Cobos, Rodriguez Saa, entre otros. Nadie salió en cámaras, nadie pidió micrófonos. Entendieron perfectamente que allí, no representaban a nadie. Entendieron que allí, no eran más que ciudadanos preocupados por el futuro del país.
La gran mayoría de la gente congregada ayer, seguramente tiene pensamientos muy distintos, seguramente tiene no muchas coincidencias con el que tenían al lado. Pero tenían algo en común: un decir basta al avasallamiento de las instituciones a que estamos siendo sometidos. Y eso era lo fundamental: dejar de lado lo que nos diferencia y poner por encima de todo lo que es más importante.
Y creo que muchos de estos políticos lo están entendiendo también. No tienen muchas coincidencias, buscan objetivos totalmente distintos, pero por sobre todas las cosas, entienden que hoy lo fundamental es rescatar las instituciones del país, que un país donde no exista división de poderes, organismos de control idóneos, etc, etc, etc, no puede ser un país viable. Y entonces, buscan dejar de lado sus diferencias y trabajar por lo más importante. Ya lo están haciendo en el congreso, ya empiezan a buscar acuerdos electorales.
Si, no tienen una figura representativa que pueda encarnar y llevar adelante esos acuerdos. Perfecto, hay que buscar otras formas. Qué es lo peor que nos ha heredado el peronismo? El personalismo a ultranza. El imponer siempre UNA  sola figura como la encarnación de todo. Y eso ha sido siempre lo peor que le pudo ocurrir al país.
Ni siquiera todas las aberraciones de Menem nos hicieron ver que eso no puede existir más. El absurdo intento de la Alianza fue algo malparido y sinsentido, sin fundamentos coherentes. Creo que hoy, los políticos opositores lo están entendiendo y que, con todas sus diferencias, tendrán que buscar acuerdos que vayan en la dirección que sea mejor para la gente. Y sumarse, entre todos, para llevarlo adelante. Uno de ellos, que por sí solo tal vez podría sacar un 20% de votos, unido a otro que sacaría un 15%, más otro con un 10%, etc. Y teniendo la altura como para ver que DEBEN  llegar a acuerdos que beneficien a TODOS, y no solo a sus intereses, pueden lograrlo. Y tengamos entonces un presidente con poder de decisión, pero también un vicepresidente en igualdad de condiciones, y un Jefe de Gabinete, y Ministros en iguales condiciones, y formar así una especie de cuerpo colegiado que trabaje por el bien general. Terminando de una vez por todas con la lacra del personalismo enfermo con que nos han manipulado hasta hoy.
Si esto es posible, el aporte del kirchnerismo a ello será invalorable.


Esta gente no cambio

Anoche, radio de por medio, compartimos una incredulidad con Jorge Fernandez Diaz. Ambos, después de leer todas las barbaridades que “supuestos” intelectuales decían en Carta Abierta sobre la marcha, no podíamos entender, no nos entraba en la cabeza como personas con esas capacidades (y yo pongo nombres, él no lo hace porque obviamente esta en un gran medio y tiene que guardar cierta compostura: no hablo de Forster porque no me cabe duda que es un parásito comprado por el gobierno, pero el señor Mempo Giardinelli, él sí, expresa verdaderamente su pensamiento, él sí que no dudo que no está comprado, que dice lo que dice porque realmente piensa así), podían decir las aberraciones que allí expresaban.  Afortunadamente, estaba con él la señora Graciela Fernandez Meijide que lo aclaró con una sola frase: “esta gente no cambió”. Y es así. Lo traduzco en mis propias palabras: estos tipos, allá lejos y hace tiempo, se tragaron el verso de que el peronismo era revolucionario, y ahí se quedaron. No veían las persecuciones a los que pensaban distinto, la demagogia, el clientelismo barato, el mesianismo delirante. El fascismo, en suma. Los más progres, los más radicalizados, creyeron incluso que podían hacer la revolución y así nos fue. Solo conozco  un intelectual y poeta de esa época que hizo una feroz autocrítica de ellos y de esa época, diciendo más o menos: “éramos cuatro pendejos delirantes y creímos que podíamos hacer la revolución. Una estupidez total, un imposible”. Y yo agrego, porque no estoy seguro si habló de eso, que se dejaron lavar el cerebro por cuatro hijos de puta que los usaron, y así mandaron al muere a muchos.
Estos tipos, que hoy se expresan como se expresaron, se quedaron en el pensamiento de esa época. Para ellos, nada cambio a pesar del tiempo transcurrido, siguen viendo el mundo exactamente de la misma manera que en los años 70. Es decir, no evolucionaron ni un ápice.
En manos de esos imbéciles trasnochados está el país hoy, y quieren llevarnos al desastre.

Afortunadamente, anoche la gente demostró que no es tan idiota.

lunes, 9 de febrero de 2015

Revolucion y equivocos

Los años 60', 70' fueron años de mucha efervescencia, de mucha ebullición y transformaciones. Dos revoluciones simultaneas comenzaban a desarrollarse. Por un lado, ideológicas, con movimientos de liberación, con acciones sumamente violentas en general, rebeliones sangrientas en pos de la emancipación, grandes batallas ideológicas por otros lados, que desembocaban también en persecuciones ideológicas y, sobre todo, en el inicio del papel mesiánico y delirante de los EEUU de arrogarse el mote de rectores del mundo.  En su mismo vientre, paralelamente al creciente beliscismo, brotaban manifestaciones contrarias, en defensa de la paz, fundamentalmente protagonizadas por miembros de la otra revolución naciente, relacionada principalmente con la música. Nuevos y frenéticos ritmos sacudían la modorra imperante, acompañados en muchos casos con letras relacionadas a esa revolución ideológica que representaban. Y estas dos manifestaciones se extendían por el mundo con caracteristicas diferentes según los distintos lugares.
Las juventudes de esos momentos crecían y se desarrollaban absorviendo a la vez las manifestaciones de esas dos revoluciones simultaneas. Y si bien una revolución estaba dirigida hacia una zona más concreta, más práctica, digamos, hacia lo politico-ideológico, y la otra más hacia lo espiritual, lo profundo de la vida y la existencia,  la natural capacidad juvenil para hacer simbiosis de las cosas, para saber que las cosas no necesariamente deben ser solo de una forma, la capacidad de tener la suficiente apertura mental para saber  tomar de aqui y de allí lo que es mejor, lograban que tanto los ideales de una como de otra revolución, se entremezclaran, se influenciaran entre ellos, logrando una visión absolutamente nueva del mundo.
Mucho tuvieron que luchar y manipular los grandes poderes para lograr que esas manifestaciones (que obviamente no eran favorables a ellos) perdieran su fuerza, su valor, y que lograran extenderse en el tiempo y el espacio.
Viendo hoy la evolución de todas estas manifestaciones, es obvio el absoluto triunfo de los manipuladores. Han logrado tal mezcolanza, tal tergiversación de ideas, sentimientos, anhelos, que escuchar actualmente a alguien "supuestamente" progresista, supuestamente "revolucionario", en general, mueve a risa.
Veamos nuestro país, que es donde vivimos y lo que mejor podemos entender.
Aquellos idealistas de los 70, en su mayoría imbuidos de los ideales de ambas revoluciones entremezcladas, y lamentablemente también, en su mayoría engatusados por el peronismo -uno de los mayores errores de nuestra historia-, y manipulados por siniestros personajes que decían abrazar esos ideales para poder convencerlos, decidieron tomar un camino que nos llevó no sólo a no lograr nada en cuanto a una "supuesta" revolución en lo político-concreto, sino a quedar sumergidos en un vacío pavoroso en relación a la otra revolución, la más profunda, la más verdadera.
Aquellos idealistas que crecían al ritmo de mensajes como "esta noche, el silencio me acompañara/ esta noche, mirar el cielorraso y pensar/ será el punto de partida para comenzar/ esta noche, que no parece ser igual/ me encuentro conmigo pensando que cosa soy yo", o "hombre, niño reacciona ya/ no, no corras más a ciegas/ hay mil cosas que realizar/ y el momento nunca llega./ Ahora es el preciso instante/ en que debo despertarme/ para mirar dentro mio/ donde existe la verdad/ terminar con los sueños y el hastío/ caminar en busca de igualdad/ si es preciso yo voy a luchar/ pero antes debere gritar que quiero paz" también advertencias, del tipo "Sigue siempre adelante sin mirar atrás/ total que te importa un escollo más/ trata siempre de ubicarte en el primer lugar/ que a nadie le interesa si quedás atrás" , decidieron, impulsados por esos siniestros personajes, que había llegado la hora de la revolución, la otra, la política y que, si era necesario, como expresaban otros exponentes de la revolución cultural..."jugo de tomate frio/ en las venas/ en las venas deberás tener".
Hoy, la derrota de la revolución política es absoluta, pero más absoluta es la derrota en la otra, la importante, la cultural. Aquellos exponentes de un mensaje nuevo, de  evolución, de mejores ideales, tiene hoy como herederos a falsos exponentes que la van de excéntricos, de surrealistas ad hoc, que de surrealismo no tiene nada porque no es más que pedos sinsentido, falsos exponentes que sólo buscan el éxito propio mintiendo a la gente con mensajes pseudo-progres, que no son más que pobres faloperos cuyo mensaje, en definitiva, es el que transmiten. Falopa, evación, sinsentido, ruido, ruido, ruido.  Estos si que tienen jugo de tomate frio en las venas.
Para aquellos que supimos vivir al amparo de aquellos nuevos ideales culturales, que no nos dejamos engatusar por aquellos que pretendían hacer creer que el cambio vendría por otro lado, no por el verdadero, no por el profundo, por el camino interior, para aquellos que hoy nos duele en el alma un país que ha elegido una banda de delincuentes para gobernar, porque en sus pobres cabezas hoy les han mezclado tanto las ideas que no son capaces de ver la realidad, estos días son, como también decían los Vox Dei..."azucar amargo".